LA TERAPIA DE PAREJA

La relación de pareja puede constituir una fuente de satisfacción o una fuente de conflictos que derivan en diversas patologías (depresión, ansiedad, disfunciones sexuales, adicciones, afecciones psicosomáticas, etc).

A veces los problemas surgen por diferentes posiciones en la forma de ver la vida, en las expectativas, estilos de crianza de los hijos, relaciones complicadas en el entorno familiar o problemas laborales o económicos.


En otras ocasiones la fuente de conflictos se derivan de un problema puntual que desestabiliza la relación y que puede llegar a destruirla, como una infidelidad, adicción de un miembro de la pareja o pérdida específica de confianza por una causa en concreto.

Dentro de la terapia de pareja cabría distinguir entre la intervención dirigida a solucionar problemas de relación por desgaste o cambio de la dinámica interactiva y la derivada de los conflictos concretos.

Normalmente los problemas de pareja no resueltos entran en una espiral basada en la interacción negativa, aparecen las mutuas descalificaciones, el abandono emocional, un estilo defensivo en la comunicación, suspicacia y distanciamiento entre ambas partes, lo que supone un clima familiar irrespirable, fuente de angustia y falto de gratificaciones.

En este sentido, la terapia de pareja se centra en un programa que aborda los diferentes aspectos de la relación, constando cada uno de ellos de variadas estrategias de modificación del estilo de relación y expresión de emociones.


El abordaje terapéutico se realiza sobre:


1. Incremento del intercambio de expresiones de afecto positivo y gratificación mutua


2. Estrategias para controlar los episodios de mal humor y muestras de hostilidad


3. Modificación del estilo de comunicación entre los miembros de la pareja


4. Forma de expresar los sentimientos negativos


5. Potenciación de la expresión de sentimientos positivos


6. Técnicas de solución de problemas


En caso de que algún miembro de la pareja presente problemas específicos (adicción, ansiedad, depresión...) puede ser necesaria la implementación de una terapia individual para superar problemas personales específicos.